El presidente del Sevilla José María Del Nido lamentó ayer, en una conferencia de prensa, que se hubieran cumplido "desgraciadamente las previsiones más pesimistas" debido, en su opinión, "a la presión social y mediática". Del Nido señaló su profundo desacuerdo con la sanción, "tanto por la calificación de muy graves de los sucesos acaecidos como por las causas en las que se basa", afirmó
Del Nido mostró el documento10 emitido por el Jefe Superior de Policía de Andalucía Occidental, Antonio Bertomeu, en el que dice, "en tres ocasiones", que el club sevillistas adoptó la totalidad de las medidas previamente solicitadas por la policía. Asimismo remarca, según señaló, la colaboración del Sevilla en la adopción de medidas preventivas "Todo esto no se ha tenido en cuenta", afirmó Del Nido, quien anunció el correspondiente recurso, en el plazo de 10 días, no ya para que se reduzca la fuerte sanción, sino para que se anule en su totalidad.
Por otra parte, el juez de Instrucción número uno de Sevilla dejó ayer en libertad sin fianza al último joven detenido por los incidentes del Sevilla-Betis del domingo. Esteban J.F., de 19 años, al que se le acusa de participar en la brutal agresión al vigilante de seguridad Antonio Orrego, declaró ante el juez que no participó en la paliza sino que sólo intentó separar a los que golpeaban al guardia de seguridad. Representantes del sindicato UGT denunciaron ayer que el derby estuvo atendido sólo por 64 guardias de seguridad privada, en lugar de los 150 previstos por la empresa Prosegur. El resto eran auxiliares, en su mayoría estudiantes, contratados como acomodadores o para picar entradas.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 12 de octubre de 2002