La cotización del BBVA ha subido el 7,98% en esta semana, en parte gracias al mantenimiento del dividendo en la cuantía acordada por la entidad y, también, porque la reacción del mercado estadounidense ha permitido valorar el gesto. La entidad destinará entre el 50% y el 55% del beneficio al pago de dividendos y el consejero delegado afirma que ello supone seguir en la misma línea del ejercicio anterior. A finales del primer semestre, el beneficio neto del grupo BBVA alcanzó los 1.166 millones de euros, con un descenso del 8,9% respecto del mismo periodo del año anterior. La entidad también comunicaba esta semana que no espera obtener beneficios de la filial argentina en al menos dos ejercicios más. En la sesión del pasado miércoles, las acciones del BBVA marcaron el mínimo anual en 7,06 euros, lo que suponía acumular una pérdida del 49,21% en el año. Desde ese nivel y hasta el cierre de la sesión del viernes las acciones recuperaron un 15%, con lo que en el ejercicio sólo bajan el 41,58%. El BBVA pagó el jueves 0,09 euros como segundo dividendo a cuenta de los beneficios de este año, lo que supone un aumento del 5,88% sobre los dividendos a cuenta de 2001.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 13 de octubre de 2002