Con las últimas mareas vivas del Cantábrico, los pescadores de algas salen a la captura de esta vegetación marina que después depositan en grandes montañas en el puerto donostiarra. Es un proceso que se repite todos los años. La gelidium sesquipedale, de gran interés ecológico, pues da la apariencia colorista al mar, produce también un indudable rendimiento comercial. Es útil para la industria cosmética y farmacéutica, además de aprovechable para fabricar piensos. Y sirve para acompañar platos en restaurantes selectos.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 15 de octubre de 2002