Soy un estudiante de segundo de comunicación audiovisual en la Escuela Politécnica Superior de Gandia, centro de la Universidad Politécnica de Valencia. Eso de que soy estudiante es un eufemismo porque hace ya un mes que deberían haber empezado las clases y aún no tenemos profesorado. El primer día se nos comunicó que era culpa de la LOU, ya que ésta anulaba la forma preexistente de contratación dejando a las comunidades autónomas la elaboración de decretos para la contratación en sus universidades públicas, y que la Generalitat aún no había presentado a 16 de septiembre un borrador. Mi carrera es de nueva implantación en la Universidad Politécnica, y como formo parte de la primera promoción no tenemos ningún docente. La situación se ha vuelto insostenible, ya que muchos de mis compañeros están alquilados, muchos son de otras comunidades, hay algunos Erasmus (imaginen la visión que exportamos de la universidad pública española)... Se nos planteó la posibilidad de que el curso se alargase. ¿Saben a cuánto están los apartamentos en Gandia en el mes de julio?
Resumiendo, no sé ya si la culpa es de la dirección del centro o del Partido Popular, tan sólo sé que no tenemos profesores y nadie nos dice cuándo los tendremos.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 16 de octubre de 2002