Josep Piqué, ministro de Ciencia y Tecnología, bajó el tono ayer a la polémica levantada alrededor de la reforma para flexibilizar los límites de participación accionarial en las cadenas de televisión, afirmando que no ve mal que un mismo accionista pueda tener participación en varias cadenas siempre que no ejerza la gestión y el control sobre más de un medio. 'Una cosa es que se pueda permitir la concentración en cuanto al control de cadenas de televisión y otra es que se puedan permitir ciertas participaciones cruzadas sin posiciones mayoritarias y sin control de gestión ninguno y, por lo tanto, sin efectos políticos', afirmó.
Piqué ratificó también la decisión del Gobierno de culminar la reforma del régimen audiovisual, al anunciar que el Gobierno tendrá definido su proyecto sobre el sector antes de fin de año, y señaló que las modificaciones introducidas en la Ley de Televisión Privada no guardan relación con la fusión digital entre Sogecable y Vía Digital. 'Ambos procesos van a correr en paralelo, pero no hay que ligar necesariamente una cosa con la otra', concluyó el ministro.
Apoyo de UTECA
La Unión de Televisiones Comerciales Asociadas (UTECA), integrada por Telecinco, Antena 3 y Sogecable, afirmó ayer que apoya las medidas adoptadas por el Gobierno para reordenar el sector audiovisual porque 'clarificarán notablemente el horizonte televisivo en España'. UTECA respalda la integración de Vía Digital y Sogecable porque 'fortalecerá' el sector audiovisual en España. Además, considera que esa fusión es aún más comprensible por la grave crisis económica internacional y las serias dificultades que atraviesa el sector de la televisión de pago en Europa.
Sin embargo, UGT expresó ayer su preocupación por las modificaciones previstas. 'Entendemos que si esta medida se llevara a cabo, el panorama de los medios de comunicación se parecería peligrosamente al modelo italiano, es decir, se produciría una concentración excesiva y pondría en peligro la libertad de expresión en nuestro país', afirmó la Federación de Servicios de la central sindical.
Por su parte, el portavoz de Izquierda Unida (IU) en el Congreso, Felipe Alcaraz, calificó de 'atropello' la medida. 'Hay peligro de que esto se transforme en la ley de la selva, que siempre es la ley del más fuerte', observó Alcaraz.
Jesús Caldera, portavoz del Grupo Socialista en el Congreso, se mostró cauto sobre la reforma, aunque criticó el procedimiento al señalar que 'no es aceptable plantear una reforma tan importante por la puerta trasera'. El portavoz confirmó que el PSOE solicitará una ampliación del plazo de presentación de enmiendas a dicha ley, por entender que siete días no son suficientes para analizarla.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 16 de octubre de 2002