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Ibarra amenaza con abrir su región a la inmigración 'espectacularmente'

El presidente de la Junta de Extremadura, el socialista Juan Carlos Rodríguez Ibarra, advirtió ayer al Gobierno de Aznar de que abrirá 'espectacularmente' la frontera extremeña a la inmigración si no se mantiene el subsidio agrario o no hay apoyo desde el Ejecutivo central para crear industrias transformadoras que asuman al colectivo de jornaleros.

Rodríguez Ibarra recordó en Mérida que la reconversión industrial había generado jubilados de 'oro' y rechazó que se pueda seguir llamando 'vagos' a gente del medio rural, a trabajadores con 'las manos encallecidas'. El dirigente socialista negó que Extremadura sea una región subsidiada y criticó la política del Gobierno popular: 'No quiere usted que haya gente que reciba una prestación pero tampoco permite que se cree transformación agraria, a través de fábricas, para que el obrero del campo pase a la industria'.

Después lanzó un aviso para navegantes: 'Así que... o me deja que transforme Extremadura, que haga industrialización, y me ayuda, o me mantienen el Aepsa [antiguo PER] o no tendremos más remedio que hacer propietarios a los jornaleros o, lo que es peor, no tendremos más remedio que abrir espectacularmente la frontera extremeña para que venga toda la inmigración que quiera'.

Por su parte, el secretario regional de CC OO de Extremadura, Valentín García, anunció que los sindicatos continuarán la campaña de movilizaciones. 'Estamos convencidos de que los trabajadores agrarios extremeños son el colectivo que más ha hecho por la modernización de esta región, pero tienen la peor cobertura por desempleo', dijo.

En el mismo sentido se manifestó el líder regional de UGT, Miguel Bernal: 'Veríamos positivamente que, restituidos los derechos, se pudiera abrir una mesa agraria donde pudiéramos estar hablando, por ejemplo, de un sistema de prestación contributiva de desempleo agrario razonable y favorable para los trabajadores'.

La consejera de Presidencia, Violeta Alejandre, calificó la medida del PP de 'atraco a los más desfavorecidos' y advirtió de que la desaparición del subsidio agrario puede provocar el éxodo de los pequeños pueblos.

* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 16 de octubre de 2002