Los ayuntamientos de Pamplona y Vitoria han congelado la disolución de los grupos municipales de Batasuna que tenían prevista y piensan pedir nuevas aclaraciones más detalladas al juez Baltasar Garzón sobre las consecuencias de sus autos. El juez precisó recientemente a una consulta de la Federación Navarra de Municipios y Concejos que su decisión de suspender las actividades de Batasuna no alcanza a sus grupos municipales.
El Ayuntamiento de Pamplona ha retirado del orden del día del pleno de mañana el punto en que se proponía la disolución del grupo municipal abertzale. Regionalistas, PSN y CDN, que insistieron ayer en su 'voluntad firme' de disolver el grupo y pasar a los ediles independentistas a un nuevo grupo mixto, quieren antes 'recabar información más detallada' del magistrado.
El alcalde de Vitoria, el popular Alfonso Alonso, que resolverá definitivamente el viernes el apartamiento de los tres ediles de Batasuna de las sociedades municipales, pedirá también 'por prudencia' una aclaración 'definitiva' al juez antes de disolver el grupo.
De su lado, los servicios jurídicos de las Juntas Generales de Guipúzcoa consideran que los autos de Garzón son de 'aplicación obligatoria', pero 'conducen a contradicciones formales y materiales difíciles de resolver', informa Efe.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 16 de octubre de 2002