Después de haber soportado un curso 2001-2002 plagado de problemas que culminaron con destrozos del material del centro, además de graves insultos, amenazas y agresiones físicas hacia el profesorado y alumnos, protagonizados en muchos casos por personas ajenas al centro; tras comunicar todo ello a los responsables educativos afrontamos ya desde el primer día de clase los siguientes problemas:
- Un número de alumnos por clase muy por encima de la capacidad de algunas aulas, lo que hace inviable la debida atención al altísimo porcentaje de alumnos que presentan dificultades de aprendizaje o de tipo social, dado el entorno en el que se sitúa el centro y la circunstancia de contar con un importante número de alumnos pertenecientes a minorías étnicas (la mayoría del asentamiento de El Vacíe).
- La no disposición del profesorado suficiente ni especializado para atender a dichas minorías.
- Un mobiliario bastante deteriorado que, al margen de ofrecer una imagen suburbial, no constituye en nada una invitación al cuido y el respeto.
- La falta de nombramiento de profesores sustitutos para cubrir las dos bajas existentes por enfermedad y por permiso oficial no retribuido, lo que supone una alteración importante en la dinámica inicial del curso.
- La ausencia de policía en las inmediaciones del centro que hace posible que contemos con la presencia de jóvenes ajenos a la comunidad educativa que llegan al centro saltando la valla de protección y alteran el orden.
Por todo ello, exigimos:
De la dirección del centro: Que tramite el presente escrito a las autoridades educativas y se haga eco de nuestras peticiones.
De los padres: Que adopten una postura activa en la reivindicación de una educación en condiciones dignas para sus hijos.
De la inspección: Que realice las gestiones oportunas para que la situación actual cambie radicalmente de signo.
De la administración educativa: Que deje de mirar a otro lado y disponga los recursos necesarios para que este centro no tenga que sufrir una cuota extra de problemas por razones de ubicación geográfica u olvido administrativo.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 17 de octubre de 2002