Las emisiones españolas de gases de efecto invernadero se alejan cada vez más de lo que fijó el Protocolo de Kioto en 1997. Durante el año pasado su volumen creció otro 1,4% sobre el nivel de 1990, llegando al equivalente de más de 390 millones de toneladas de CO2, según los datos que presentaron ayer CC OO y la revista WorldWatch. Con este aumento, la producción de gases es un 35% superior a la del año base (1990). Según el Protocolo de Kioto, que el Gobierno ratificó en febrero, en 2012 el aumento no puede exceder del 15%.
El aumento de 2001 es pequeño, pero el secretario confederal de Medio Ambiente de CC OO, Joaquín Nieto, declaró que se debe 'al buen año hidrológico', y no 'a los planes del Gobierno. 'La Administración juega la carta ecologista, pero no cumple sus compromisos', afirmó el editor de la edición española de WorldWatch, José Santamarta.
A este ritmo es 'imposible' que el nivel de emisiones de España se acerque a lo acordado, señalaron Nieto y Santamarta. Nieto calculó que la UE podría imponer sanciones a España de más de 3.000 millones de euros por este incumplimiento.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 17 de octubre de 2002