Concebidas como un elemento más de la formación integral del alumnado y de vitalidad cultural, las residencias de estudiantes constituyen un referente en la historia de las universidades. Desde este curso, la Universidad Jaume I cuenta ya con un establecimiento de estas características con capacidad para 250 estudiantes y ubicada detrás de la Biblioteca de Riu Sec. Construida y gestionada por una empresa privada, lo que ha supuesto un coste cero para la propia universidad, la residencia castellonense pasará a manos de la institución académica dentro de 50 años. Por ahora aloja a 160 estudiantes.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 21 de octubre de 2002