El Ayuntamiento de Orihuela, gobernado por el PP, ha contraído una deuda superior a cuatro millones de euros con la empresa Necso, la hasta ahora adjudicataria del servicio de recogida de basuras que de forma inminente verá rescindido su contrato. Así lo refleja un informe del servicio municipal de intervención antes de suspender definitivamente las relaciones laborales con la citada mercantil. El alcalde, José Manuel Medina, siempre ha negado la existencia de esta carga financiera. El documento ha sido elaborado para el pleno del martes, donde se debatirá la propuesta que el pasado 1 de octubre hizo el equipo de gobierno: rescindir el contrato con NECSO.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 26 de octubre de 2002