Efectivos de la sección de especialistas fiscales de la Guardia Civil y de la Oficina de Análisis e Investigación Fiscal (Odaifi) confiscaron el pasado viernes en el recinto aduanero de La Farga de Moles (Alt Urgell) dos colmillos y dos patas disecadas de elefante, y 16 cornamentas de venado que un automovilista pretendía introducir de forma ilegal en Andorra.
La intervención policial se produjo en el interior de la aduana hispano-andorrana cuando los agentes interceptaron una furgoneta con matrícula de Andorra que pretendía entrar en el país vecino. El conductor del vehículo fue identificado como A. R. M., de 45 años y residente en el Principado de Andorra. Los agentes, en aplicación de la Ley de Represión del Contrabando, levantaron un acta por infracción administrativa por tratar de introducir en el país vecino la mercancía sin la documentación aduanera que acreditara su legal exportación. Se sospecha que la mercancía iba destinada a una tienda de objetos de regalo de Andorra.
Fuentes de la Guardia Civil explicaron ayer que, además de cometer una irregularidad administrativa, el infractor ha podido vulnerar también el convenio internacional que regula el tráfico de especies animales en peligro de extinción. El comercio de colmillos de elefante está actualmente prohibido y perseguido por la legislación de muchos países, entre ellos España.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 29 de octubre de 2002