El dirigente de Aralar, Patxi Zabaleta, partido escindido de la suspendida Batasuna, defendió ayer que la consulta que propone el lehendakari, Juan José Ibarretxe, para su propuesta 'debe efectuarse después de un proceso de paz' y en todo caso en ausencia de 'todo tipos de violencias'. El ex miembro de la Mesa Nacional indicó que 'los procesos soberanista y de pacificación podrían ser simultáneos en el tiempo, pero en todo caso tienen que ser autónomos y diferentes para que no quede ninguna duda de que en el proceso de paz se quiere conseguir ningún logro de tipo político material'.
Pero también fue claro a la hora de indicar que para llegar a la paz no es suficiente con 'pedirle a ETA que desaparezca' o con hacer manifestaciones en su contra, sino que hay que 'trabajar' para lograr ese escenario de paz. En su opinión, tal escenario constaría de tres etapas: 'Una primera etapa de tregua, una segunda de distensión de los Estados [español y francés] y la tercera de tratamiento de las víctimas de la violencia' y de los presos de ETA, que se consideran víctimas, afirmó. Zabaleta acogió con buenos ojos la propuesta de nuevo estatus de libre asociación del País Vasco con España elaborada por Ibarretxe. 'La propuesta es positiva, ha creado ilusión y ha removido la situación política'.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 29 de octubre de 2002