Los representantes vecinales de Alcalá de Guadaíra (Sevilla) se concentraron ayer ante la comisaría del Cuerpo Nacional de Policía para protestar por el estado de las instalaciones y exigir la construcción de unas nuevas. Los vecinos denuncian que el edificio, construído en 1929, presenta humedades, grietas y 'peligro de derrumbe' y no reúne 'condiciones dignas' ni 'para los ciudadanos, ni para los funcionarios, ni para los detenidos'. El gobierno municipal recordó que el Ayuntamiento ha cedido al Ministerio del Interior un solar en la barriada de Rabesa para construir la comisaría. Según el portavoz municipal, Francisco Pérez Moreno, Interior aceptó la oferta en junio, pero aún no ha enviado a sus técnicos para que concreten el suelo que necesitan. Los vecinos entregaron ayer cascos a las personas que se disponían a entrar en el edificio 'para alertarle del peligro que corren'.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 6 de noviembre de 2002