El PSC presentó ayer en el Parlament de Catalunya una proposición no de ley que reclama al Gobierno de la Generalitat la creación de un registro oficial de los centros y profesionales que se dedican a la medicina natural.
Esta medida pretende regular el ámbito de las medicinas complementarias para evitar 'intrusismos' y 'malas pra-xis'. La diputada del grupo socialista Carme Figueras aclaró que el registro debe establecer 'criterios previos de acreditación' y 'estar al alcance de toda la población'.
La medicina natural se mueve en el marco de la alegalidad, ya que el único control que el Gobierno central tiene sobre el sector es de carácter fiscal. Se calcula que en Cataluña hay unos 2.000 profesionales y, según las estimaciones, un tercio de la población ha recurrido alguna vez a terapias alternativas.
La diputada socialista propuso también 'facilitar a la población todas las informaciones necesarias sobre la medicina natural y sus posibilidades', además de crear una comisión de expertos que 'valide el proceso de regulación'.
Figueras recomendó la incorporación progresiva al sistema sanitario de los profesionales del campo de las medicinas alternativas. La parlamentaria puso como ejemplo la iniciativa del hospital de Mataró, donde funciona un equipo multidisciplinar desde hace un año.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 8 de noviembre de 2002