El Parlamento catalán aprobó ayer por unanimidad una modificación de la Ley de Policía de la Generalitat de 1994 que permitirá la afiliación de los agentes de los Mossos d'Esquadra a los sindicatos de clase. Hasta ahora, los agentes de la policía autonómica sólo podían militar en sindicatos corporativos. Este derecho lo disfrutan desde 1992 los agentes de la Ertzaintza, mientras que en el caso del Cuerpo Nacional de Policía la sindicación también está restringida.
La modificación aprobada ayer culmina una iniciativa de la izquierda parlamentaria (PSC, ERC, ICV) que derivó en una ponencia conjunta de todos los grupos de la Cámara hace ahora un año. Coincidiendo con esta decisión, ayer mismo fue presentado el Sindicat de Policies de Catalunya, nacido de la fusión de dos organizaciones (la UPC y el SUME) con Comisiones Obreras.
La nueva organización SPC-CC OO se constituyó formalmente el pasado mes de junio a la espera de la reforma aprobada ayer. A partir de ahora agrupa a más de 2.500 afiliados, prácticamente una tercera parte de los agentes que tiene el cuerpo de los Mossos d'Esquadra, y su secretario general será Albert Fabregat. La comisión ejecutiva de este sindicato hizo público ayer un comunicado en el que asegura que la resolución de sus reivindicaciones no sólo beneficiará a los profesionales del cuerpo, sino a la seguridad pública de Cataluña.
Por su parte, el secretario general del Sindicato Autónomo de Policía (SAP-UGT), Juli Mosquera, también se felicitó por la reforma y aseguró que la medida acabará con el inmovilismo en que se encuentran las negociaciones con la Generalitat.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 14 de noviembre de 2002