Sanidad resolvió el 7 de abril de 1998 abrir expediente disciplinario al anestesista Juan Maeso, único imputado por el contagio masivo de hepatitis C en cuatro centros hospitalarios de Valencia. El 25 de aquel mes resolvió también su suspensión provisional de funciones. El letrado de Maeso, Francisco Davó, presentó recurso contra ambas decisiones por entender que se violaban preceptos constitucionales. Sin embargo, el Tribunal Superior de Justicia (TSJ) ha decidido desestimar ambos recursos y confirmar tanto el expediente disciplinario como la suspensión provisional de funciones. Entiende la Sala que no sólo no se lesionan principios constitucionales, sino que procede mantener dichas medidas hasta que se resuelva por vía penal el grado de implicación del especialista en el contagio de hepatitis C a más de 270 pacientes.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 16 de noviembre de 2002