Hace dos meses, Rosa, la ganadora de la primera edición de Operación Triunfo (OT), se quedó sin voz. Suspendió la macrogira Rosa 2002 de presentación de su primer disco y se marchó a su casa para reponerse, ya que los médicos le prescribieron reposo. Desde entonces, la granadina -que reapareció la pasada semana en el papel couché con motivo de la gala de la MTV- no había vuelto a hacer declaraciones públicas hasta ayer. La cantante convocó una rueda de prensa en Sant Just Desvern (Barcelona) -a la que asistieron una cincuentena de fans de toda España que no pararon de piropearla en todo momento-, que se celebró en el mismo plató desde donde se emiten las galas de OT. En ella anunció que, una vez superado el bache, se siente con ánimos de volver a los escenarios y que se está preparando para ello y también para mantenerse en forma físicamente. Contó que, desde hace tres semanas, se ha instalado en Barcelona con su hermano, que ha empezado a arreglarse la dentadura -ayer estrenó un corrector-, frecuenta el gimnasio y sigue clases de inglés con un profesor particular. Desmintió a las revistas del corazón que publicaron que la eurovisiva estaba embarazada -"cuando me enteré, se me pusieron los pelos de punta; pensé, 'pero, dónde me he metido yo"- y agradeció a todas las "lentejitas" (su público, al que vé desde el escenario como lentejas hirviendo) el apoyo recibido durante este tiempo.-
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 21 de noviembre de 2002