España tendrá serios problemas para ser competitiva a medio plazo. La CEOE y el Foro Económico Mundial han identificado varios factores de riesgo para el tejido empresarial. La caída de las exportaciones ha sido la nueva señal de alarma, que se une a la inflación, la falta de innovación tecnológica, la poca independencia judicial, la red de tráfico de influencias y la burocracia.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 24 de noviembre de 2002