Los primeros bloqueos de camioneros comenzaron en varios puntos de Francia en la madrugada de hoy con la luz verde de los dos sindicatos mayoritarios del transporte -CFDT y CGT-, mientras que los gremios minoritarios se disponían a firmar un acuerdo con las patronales de los transportistas. Estas agrupaciones consideraron ayer, tras siete horas de negociaciones, que la oferta de la patronal de un aumento salarial del 14% en tres años, con una revisión a tenor con la evolución de la inflación, cumplían la "mayoría" de sus objetivos.
Los transportistas afiliados a los dos principales sindicatos incluso pasaron a la acción antes de que se dieran por cerradas las negociaciones. Los llamamientos a montar barricadas fueron fuertes en Burdeos, a 200 kilómetros de la frontera española, y en Lomme, a las afueras de Lille, cerca de la frontera belga, donde unos 50 camioneros bloquearon con sus coches particulares la entrada y la salida de un importante mercado mayorista impidiendo el acceso de camiones, entre ellos algunos españoles, según los informes de medios locales. Un responsable de la CGT dijo a Efe que un bloqueo de los pasos fronterizos con España estaba excluido. El objetivo son los "camiones franceses y las zonas industriales", explicó.
En Rouen (noroeste), militantes de la CFDT y CGT instalaron barreras en un punto de acceso a la zona industrial de esa ciudad. En Correze (centro), varios camiones bloqueaban un acceso a la autopista A-20, según informaron las autoridades. La consigna es impedir el tráfico de camiones, evitando que las molestias se extiendan a la circulación de vehículos ligeros. El Gobierno ha desplegado cuarenta escuadrones de la gendarmería y de las fuerzas antidisturbios en los centros de abastecimiento de productos petrolíferos y otros puntos neurálgicos.
Sin tregua
El ejecutivo de Jean-Pierre Raffarin se enfrenta a este conflicto tras haber resuelto "in extremis" el provocado por dos organizaciones de agricultores, que cerraron durante dos días el acceso a 71 centros de aprovisionamiento a grandes superficies comerciales. Esta noche se espera que comience una huelga de controladores aéreos, acción a la que ayer se anticipó British Airways con el anuncio de que suspende sus vuelos a Francia.
Para los próximos días hay depositados preavisos de huelga por parte de los conductores de transporte de pasajeros y de ambulancias, y el martes está convocada en París una manifestación de trabajadores de ferrocarriles. La huelga del personal de France 3, uno de los canales de la televisión pública, impidió anoche la difusión de una entrevista de la periodista Christine Ockrent al jefe del Gobierno español, José María Aznar, en vísperas de la cumbre hispano-francesa convocada para mañana en Málaga.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 25 de noviembre de 2002