La unidad de cuidados intensivos (UCI) del hospital de Sant Camil de Sant Pere de Ribes (Garraf) se cerrará en los próximos días, una vez que se haya dado el alta a los pacientes actualmente ingresados. Será entonces cuando se inicie el proceso de desinfección del brote de Acinetobacter baumanii, una bacteria de gran resistencia que habita en la tierra y en el agua y no es frecuente en el cuerpo humano. Esta circunstancia ha hecho sospechar que la bacteria llegó hasta la UCI del hospital en la piel de algún paciente.
La UCI del hospital de Sant Camil se encuentra aislada desde el pasado viernes, cuando se detectó la bacteria. A finales de esta semana, tras la desinfección total de las instalaciones, se prevé que pueda volver a recibir enfermos con total normalidad.
De las personas que se encontraban en la UCI y fueron afectadas por el brote, una fue dada de alta, otra continúa ingresada en una planta del hospital y la tercera fue trasladada al hospital de Bellvitge. Una cuarta persona falleció el pasado sábado por una complicación de la enfermedad que sufría.
La Región Sanitaria Costa de Ponent ha abierto un expediente para conocer el origen del brote. Las consecuencias de la infección por Acinetobacter baumanii son infecciones urinarias, digestivas o respiratorias, que deben ser tratadas con antibióticos.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 27 de noviembre de 2002