El ministro de Defensa, Federico Trillo-Figueroa, acordó ayer con el secretario general del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, que el homenaje a la bandera española tenga carácter institucional y no se vea envuelto en polémicas partidistas como la que rodeó el acto celebrado el pasado 2 de octubre en la plaza de Colón de Madrid. La propuesta que el ministro explicó telefónicamente a Zapatero, y éste aceptó, consiste en celebrar cuatro actos anuales -el 6 de diciembre, día de la Constitución, el 12 de octubre, Fiesta Nacional, el 15 de mayo, San Isidro, y el 24 de junio, onomástica del Rey- en los que otras tantas instituciones del Estado -el Parlamento, el Gobierno, el Ayuntamiento de Madrid y el Poder Judicial- rendirán homenaje a la bandera.
Los demás meses del año, cuando hay que arriar la enseña nacional para cambiarla, le rendirá homenaje una sección de las Fuerzas Armadas (unos 25 militares), no una compañía (90 militares) como hasta ahora, y sin presencia de autoridades.
Debido a este acuerdo, que Trillo-Figueroa comunicó a los portavoces parlamentarios de CiU, Xavier Trías, y Coalición Canaria, Luis Mardones, hoy no habrá homenaje a la bandera, como estaba inicialmente previsto.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 27 de noviembre de 2002