La futura Ley de Servicios Sociales es "una ley de beneficencia propia de años felizmente superados", dijo ayer el portavoz de IU en la Asamblea, Ángel Pérez, que se reunió con ocho colectivos madrileños que han mostrado sus críticas al proyecto del Gobierno: la Federación Madrileña de Municipios, Trabajadores Sociales, UGT, CC OO, Colegio de Psicólogos, Colegio de Sociólogos, Colectivo de Discapacitados y Asociación Madrileña de Empresas de Inserción.
Pérez añadió que esta ley venía a completar el plan iniciado por el presidente Alberto Ruiz-Gallardón cuando dijo que pondría su interés en la sociedad y en la libertad: "La sociedad para él son las sociedades anónimas y la libertad, la libertad del mercado", ironizó el portavoz de IU. En su opinión, el PP lo deja todo en manos privadas, "o bien mediante la privatización, o bien por la externalización de los servicios o por conciertos".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 27 de noviembre de 2002