La empresa de pavimentos y revestimientos cerámicos Porcelanatto, participada en un 98,8% por Bank of America, anunció ayer el cierre este mes de su planta de Vila-real, uno de sus tres centros de producción. El anuncio-que la empresa justificó en lo "obsoleto" de las instalaciones de esta planta- es parte de una reestructuración del grupo y también ha supuesto la presentación de un expediente de regulación de empleo para 52 de sus 385 trabajadores, 29 de ellos fijos. Fuentes de la firma destacaron ayer que el expediente ha tenido la aprobación de UGT y CC OO y que se tramitó en dos semanas con indemnizaciones de 32 días por año trabajado, por encima del mínimo de los 20 días marcados por ley. La reordenación incluye una inversión de 12 millones de euros en tres años para lanzar nuevos productos, consolidar el departamento de diseño, investigación y desarrollo y crear un centro de I+D en su planta de Onda. Porcelanatto exporta un 30% de su producción y facturó 53,2 millones de euros en 2001, un 7% más. Sus beneficios antes de impuestos, sin embargo, entraron en números rojos con una pérdida de 1,5 millones, consecuencia de la inversión realizada para ganar capacidad de producción, según la firma.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 28 de noviembre de 2002