Un grupo de directivos de las principales operadoras europeas se reunieron ayer con el presidente de la Comisión Europea, Romano Prodi, para debatir sobre los problemas del sector. Los representantes de las telefónicas más potentes de Europa trasladaron a Prodi su convencimiento de que remontarán la crisis. Una de las operadoras más convencidas de la recuperación es Deutsche Telekom, que espera para su división de telefonía móvil un aumento del 50% en el beneficio. La facturación, según anunció ayer, crecerá un 30%.
También France Télécom comienza a divisar un horizonte más despejado. El Estado francés, con una participación del 54%, contempla una línea de crédito al operador de hasta 9.000 millones de euros, según informan medios locales. El desembolso permitiría ganar tiempo para una segunda etapa del plan de salvación de la empresa, con una deuda récord de 70.000 millones de euros.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 28 de noviembre de 2002