El Gobierno regula de una manera muy estricta los derechos de adquisición y comercialización de los derechos del fútbol, pese a que la Comisión Europea tiene abierto un expediente sobre la materia. Además de limitar la duración de los contratos a un periodo máximo de tres años, obliga a mantener un sistema de transmisiones similar al actual, que incluye un partido de Liga en abierto cada jornada, otro codificado en Canal + y el resto en pago por visión. Sogecable no podrá adquirir en régimen de exclusividad derechos para la transmisión de la Liga o la Copa por Internet o telefonía móvil.
Aunque el mercado de los derechos audiovisuales de fútbol está en proceso de regulación en Bruselas, el Gobierno no ha dudado en establecer sus propias restricciones. En un capítulo independiente de las condiciones generales, el Consejo de Ministros acordó ayer subordinar la fusión de Sogecable y Vía Digital al cumplimiento de otras diez normas, algunas de las cuales se establecen "sin perjuicio de la competencia" de la Comisión Europea.
Hoy por hoy, el fútbol es uno de los principales activos de las plataformas de pago. Y las televisiones se han convertido en el principal soporte económico para los clubes. La factura que pagan asciende a 228,3 millones de euros anuales por los encuentros de Primera y Segunda División, la mitad de sus ingresos.
Los contratos en vigor con la Liga expiran esta temporada. Sin embargo, tanto el Real Madrid (con Sogecable) como el Barcelona (con Vía Digital) tienen suscritos acuerdos hasta 2008. Fuentes de Economía aseguraron que se respetarán estos compromisos.
Pero de entrada, el Gobierno impedirá a Sogecable ejercer los derechos de tanteo y retracto y las opciones de compra o de prórroga que controla, tanto directa como indirectamente, a través de Audiovisual Sport. Esta compañía está participada por Telefónica (40%), Sogecable (40%) y la cadena de televisión autonómica catalana TV-3 (20%). Según el acuerdo de integración de las dos televisiones de pago, Sogecable pasará a controlar también el porcentaje de Telefónica.
La duración de los contratos en la fase que el ministro de Economía, Rodrigo Rato, denominó "de mayorista", no podrá exceder de tres años. Este capítulo incluye cualquier fórmula de prórroga, opción o derecho de tanteo o retracto.
Sogecable tiene también limitada la posibilidad de ejercer o comprar en exclusiva los derechos de retransmisión de la Liga o la Copa a través de sistemas de telecomunicaciones móviles (UMTS) o de transmisión de datos (ADSL o Internet).
En la llamada fase "de minorista", el Gobierno asciende a la categoría de obligación el actual status de distribución televisiva de los encuentros de Liga o de Copa, al imponer a Sogecable unas modalidades de retransmisión "equivalentes a las existentes con anterioridad a la operación de concentración".
De este modo, Sogecable (en el caso de que obtuviera los derechos futuros en exclusiva) deberá garantizar la cesión, comercialización o sublicencia en las modalidades de televisión en abierto y de pago por visión. Se mantendrá, por tanto, la emisión de un partido en abierto el sábado, otro codificado el domingo a través de Canal + y el resto de la jornada se ofrecerá en pago por visión (plataformas digitales y cableoperadores). Sogecable deberá también poner a disposición de otros agentes de televisión los correspondientes resúmenes de los partidos.
Suspensión en la Bolsa
En la Bolsa de Madrid, las acciones de PRISA avanzaron ayer el 3,68% hasta situarse al cierre a 8,16 euros cada una y después de acercarse a una ganancia del 10%. Con esa alza, los títulos del grupo han acumulado una ganancia del 16,57% en el mes.
El valor de los títulos de Sogecable, cuya cotización se suspendió a las 13.46 horas, quedó en 13,10 euros, es decir, con un avance del 1,16%. En el mes ha subido el 32,32%. Los títulos de Telefónica retrocedieron ayer un 0,58% hasta cotizar al cierre a 10,24 euros.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 30 de noviembre de 2002