Estoy pensando en cometer un delito. No sufro ningún brote esquizofrénico ni un ataque compulsivo de fama televisiva.
Simplemente quiero un trabajo. En una España que sólo va bien para quienes lo pregonan, acabo de oír que Luis Roldán se podría acoger con más facilidad al tercer grado porque cuenta con cinco ofertas de empleo, así que parece bueno para el currículum añadir una estancia en la cárcel (si encima tienes escondido debajo de una loseta unos milloncejos, ni te digo).
No sé el delito que cometeré para que me enchironen, pero ya he descartado uno. Porque también he oído que piden tres años de cárcel para el informático que inventó el programa Matanza cofrade por atentar contra el sentimiento religioso y delito contra la propiedad porque el Gran Poder es marca registrada.
¿Puede haber un delito contra el sentimiento religioso en un país supuestamente laico? ¿Qué es eso exactamente? ¿Puedo poner una demanda por atentar contra el sentimiento laico porque TVE se gaste mis impuestos en retransmitir la canonización de Escrivá de Balaguer? ¿Vale tres años de cárcel el sentimiento religioso y 10.000 pesetas amenazar a una mujer con un hacha?
¿No es irónico apelar al sentimiento religioso y a la propiedad al mismo tiempo? ¿Me lo explican, por favor?
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 1 de diciembre de 2002