La Convención de Cristianos por Europa fue clausurada en la tarde de ayer con la aprobación del Manifiesto de Barcelona, en el que se pide que la futura Constitución europea haga referencia al "reconocimiento del hecho religioso en general y cristiano en particular" de su población.
A pesar de reconocer que las instituciones europeas "tienen que ser de naturaleza aconfesional", señalan que esto "no se debe confundir con la falta de reconocimiento de una realidad social muy importante, que es el hecho religioso en sus distintas confesiones". "La neutralidad de las instituciones europeas no nace de la abstracción de la realidad social, la religión en este caso, sino del reconocimiento de la misma en el marco de las libertades definidas por los derechos humanos", se añade en el manifiesto.
La Convención de Cristianos, que se ha celebrado este fin de semana organizada por los conservadores Asociación Católica de Propagandistas y e-cristians, finalizará hoy con una misa, oficiada por el cardenal Ricard Maria Carles, y con una recepción en el Palau de la Generalitat. Ayer, el presidente de la región de Lombardía, Roberto Formigoni, pronunció una conferencia sobre la práctica de la solidaridad.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 8 de diciembre de 2002