El Gobierno catalán ha anunciado la próxima apertura en Lleida de una oficina del Instituto Catalán de Crédito Agrario (ICCA) -organismo que depende del Departamento de Economía y Finanzas- con la finalidad de descentralizar los servicios financieros que ofrece y acercarlos a los profesionales del sector agrario de esta provincia, de donde proviene el 33% de sus clientes.
El consejero de Agricultura, Josep Grau, manifestó que esta iniciativa es una respuesta a las grandes inversiones en infraestructuras de regadío y en modernización de explotaciones agrarias que se realizarán en las comarcas leridanas en los próximos años, principalmente los canales Segarra-Garrigues y Algerri-Balaguer, obras que se construirán con la aportación económica de las administraciones públicas y de los propios regantes.
"El volumen de servicios que presta el ICCA ha ido en aumento en los últimos años, sobre todo los destinados al campo de la innovación. Por eso pondremos a disposición del sector productos financieros que no pueden ofrecerle las entidades de ahorro", dijo el consejero.
El Gobierno catalán no descarta que esta oficina pueda ser en el futuro el embrión de un proyecto bancario más ambicioso dedicado a la actividad agraria y ganadera en el que estarían implicadas las principales cooperativas.
Por otra parte, el Departamento de Agricultura abrirá en Gandesa (Terra Alta) una unidad experimental agrícola dependiente del Instituto de Investigación y Tecnología Agroalimentaria, de acuerdo con un convenio firmado la pasada semana entre el Gobierno catalán y el Consejo Comarcal de la Terra Alta.
La estación debe convertirse en un centro de referencia a escala estatal del sector de la viña y el vino, así como de la producción de plantas leñosas en tierra de secano. La unidad dispondrá de los instrumentos necesarios para llevar a cabo investigaciones y estudios sobre los problemas concretos de los agricultores de la comarca, lo cual permitirá al sector a incrementar su competitividad y eficiencia.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 8 de diciembre de 2002