Antonio Carmona, el diputado socialista en la Asamblea de Madrid que, "en broma", se había burlado del desastre del Prestige, presentó ayer su dimisión como parlamentario regional. Carmona señaló: "A los socialistas nos han enseñado que cuando nos equivocamos, debemos dimitir". El diputado, que desempeñaba el cargo de portavoz de Economía del PSOE en el Parlamento Regional de Madrid, en el curso de una reunión con unos comerciantes de Aranjuez, dijo: "Estamos sobrados de votos, y si hace falta hundimos otro barco".
Las críticas arreciaron contra Carmona que al día siguiente se disculpó públicamente. Ayer, además de presentar su dimisión, volvió a hacerlo: "Vuelvo a repetir que he cometido un error por bromear en privado sobre un tema de enorme trascendencia. Por tanto, pido de nuevo disculpas públicas por ese comentario mío que fue muy desafortunado".
El secretario general del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, tachó ayer la broma de Carmona de "absolutamente inaceptable". Y añadió que la decisión de dimitir le parece "correcta".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 13 de diciembre de 2002