Según Manuel Vázquez Montalbán (16 diciembre), los zapatistas nunca han practicado "una lucha armada", el subcomandante Marcos es un personaje "esencialmente ético", y cuando insultó al Rey, a Felipe González, a José María Aznar y al juez Garzón, eso fue sólo "un desliz". Asombroso. Los zapatistas han ejercido sistemáticamente la violencia desde una ideología puerilmente marxista; con el apoyo de sectores de la Iglesia y la intelectualidad burguesa occidental -ávida de "turismo revolucionario"- sueltan disparates contra la globalización y el "neoliberalismo" mientras reprimen salvajemente a quienes pretenden defender: los indígenas. En cuanto a Marcos, el embelesado apoyo que recibe de Vázquez Montalbán, Saramago, Ramonet y demás vacas sagradas de la izquierda, no puede ocultar sus mentiras, su autoritarismo y su endeblez intelectual. Si tiene genio es, como prueba el notable libro de Bertrand de la Grange y Maite Rico, para la impostura.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 19 de diciembre de 2002