Enchiladas y tamales forman parte del menú navideño del presidente de Estados Unidos, George W. Bush, que junto a su familia más cercana pasa estas fechas en el retiro de Camp David (Maryland). La inclusión en el menú de Nochebuena de esos platos de origen mexicano y consumo habitual en Tejas es obra de la primera dama, Laura Bush, para quien suponen una tradición desde sus años infantiles en el Estado del que su esposo fue gobernador y que lo catapultó a la Casa Blanca. Bush se encuentra desde el sábado en Camp David, la residencia de descanso presidencial, donde su padre, el ex presidente George Bush, también solía pasar la Navidad junto a su familia en sus años de mandato (1989-1992). Le acompañarán su esposa y sus hijas mellizas Jenna y Barbara, que este año no han cumplido la tradición de decorar el árbol de Navidad debido a que estudian en las universidades de Tejas y Yale, respectivamente. El presidente ha prohibido a su familia que abra los regalos antes de la mañana del día de Navidad, según ha explicado su esposa. "Echamos de menos las tradiciones, porque las chicas están en la universidad, pero todavía bebemos chocolate caliente y abrimos los regalos como una familia, sólo que ahora lo hacemos en Camp David", indicó la primera dama en una entrevista que concedió a diversos medios de comunicación estadounidenses.-
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 26 de diciembre de 2002