Salgo del último claustro trimestral del instituto público donde ejerzo como profesor. Nuestro alumnado, con gran componente de inmigrantes -preferentemente magrebíes-, una extracción social baja y muy baja y
numerosos casos de desestructuraciones familiares y problemas sociales. Sus comportamientos habituales en el centro no son conflictivos. Los resultados académicos de 1º a 4º de la ESO en esta evaluación arrojan un balance de casi el 60% de alumnos con cuatro o más materias "suspendidas". Leo seguidamente la entrevista de la ministra de Educación sobre la aprobación de la Ley de Calidad y retomo el optimismo: "Vuelven la autoexigencia y el esfuerzo". Tras seis años de Gobierno del PP, esperamos ansiosos las estrategias de Operación Triunfo que inducirán a nuestros adolescentes a una "conversión" en masa y sin costarnos un duro.
Ministra, esté segura..., sus palabras nos producen hilaridad.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 26 de diciembre de 2002