El Consejo de Gobierno de la Junta de Extremadura ha aprobado el anteproyecto de Ley de la Convivencia y el Ocio, un instrumento juridico que se plantea como objetivo "servir de referente normativo y político para atajar los nocivos efectos que el consumo masivo de alcohol por parte de los jóvenes tiene en la sociedad, desde una perspectiva integral, progresista y no represiva". El anteproyecto de la denominada en otra comunidades como ley antibotellón prohíbe el consumo de alcohol por menores y en la calle, salvo en lugares autorizados, y contempla sanciones de hasta 600.000 euros.
El anteproyecto contempla que "no está permitido el consumo de alcohol en la vía y en las zonas públicas salvo en aquellos espacios para el ocio habilitados y autorizados por los ayuntamientos", según enuméro la Consejera de Presidencia, María Antonia Trujillo, al término del Consejo de Gobierno.
El Ejecutivo que preside el socialista Juan Carlos Rodríguez Ibarra ha descartado una prohibición generalizada del consumo de bebidas alcohólicas en la calle y del denominado botellón "por entender que deben prevalecer las medidas preventivas sobre las represivas, si bien esta práctica no se permitirá si afecta al descanso y a la convivencia".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 27 de diciembre de 2002