El excelentísimo (que no excelente) Ayuntamiento de Madrid se vuelca en la zona Centro a la hora de intentar resolver los problemas de tráfico, no sólo porque en esa zona pueda haber más problemas de ese tipo, sino también porque es un vivero de votos del PP.
Yo quiero recordarle al Ayuntamiento, y en particular a su concejal de Movilidad, aquello de que "todos somos contribuyentes" y, en consecuencia, exigirle que aplique también esas medidas (cochecito multamóvil incluido) a otras zonas de Madrid. Me refiero en particular a aquellas calles en las que sufrimos la presencia de las llamadas tiendas de conveniencia (Opencor, Vips, Seven Eleven, etcétera), a las que el Ayuntamiento concede licencia sin tener en cuenta las condiciones de la zona, y que originan problemas muy graves, como, por ejemplo, doble y triple fila, carga y descarga a cualquier hora incluidos los domingos a las ocho de la mañana, mendicidad, ruidos, inseguridad; y todo ello ante la absoluta pasividad del Ayuntamiento y de su Policía Municipal.
Haría bien el Ayuntamiento en abandonar de una vez sus tan costosas como inútiles campañas publicitarias de corte "roussoniano" (to el mundo es güeno) y dedicarse a aplicar la ley con garantías pero con rigor y seriedad.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 27 de diciembre de 2002