El agente de policía Antonio Adán Serrano, de 48 años, perteneciente a la comisaría de Móstoles (Madrid), falleció a mediodía de ayer tras permanecer 27 horas en coma, en la unidad de reanimación del hospital Puerta de Hierro. El policía recibió un puñetazo, presuntamente de Timoteo O. N., de 21 años, que le hizo perder el equilibrio y golpearse la cabeza contra el bordillo de una acera. El impacto le produjo un traumatismo craneoencefálico, fractura del occipital y pérdida de masa encefálica.
La agresión ocurrió a las 8.55 del sábado en un bar de Móstoles mientras apoyaba un servicio de la Policía Municipal. La víctima era padre de dos hijos, de 11 y 14 años. El ministro del Interior, Ángel Acebes, concedió al agente la Medalla al Mérito Policial a título póstumo. El presunto agresor, que fue detenido, estaba en busca y captura por dos juzgados de Madrid y Móstoles.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 30 de diciembre de 2002