Un residente con retraso mental profundo del Centro Psicopedagógico Reina Sofía de Armilla (Granada), dependiente de la Diputación, se fracturó tres vértebras al caer por una ventana del recinto, según denunciaron sus padres, quienes se quejaron, además, de que fueron avisados del suceso un día después. La Diputación de Granada ha abierto un expediente de investigación para esclarecer el suceso.
Los padres de la víctima, Antonia Jiménez García y Miguel Pérez Crespo, según denunciaron a Efe, recibieron la llamada del centro el día 21 de diciembre a las 16.45 horas, justo un día después de la caída que le causó a su hijo la fractura de tres vértebras y horas después de que fuera ingresado en el hospital Clínico de Granada.
Según los padres, su hijo, de 34 años, que sufre oligofrenia profunda por esclerosis tuberosa, conocido como Síndrome de Bourneville, además de epilepsia, cayó por una ventana del centro el pasado viernes 20 de diciembre sobre las 16.45 horas, como así le informaron posteriormente, al parecer por un descuido de los monitores, ya que en ese momento se encontraba en un salón, situado en el primer piso, junto a otros residentes, también discapacitados psíquicos.
El hombre cayó por una ventana que estaba abierta, en contra de las normas internas, según los padres, y se precipitó al suelo desde unos dos o tres metros de altura.
Un monitor de las instalaciones lo vio tirado en el suelo y creyó que se había caído cuando paseaba. El médico del centro, según la información proporcionada a los padres, no advirtió lesión alguna grave al determinar que el residente tan sólo estaba "mareado y se quejaba de dolor en un pie". Fue trasladado al hospital sobre las 13.00 del día siguiente.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 5 de enero de 2003