El ministerio de Defensa emitió ayer una nota en la que hace una balance muy positivo del año 2002 y destaca especialmente de forma muy positiva las peticiones de ingreso en las Fuerzas Armadas. La profesionalización del Ejército convierte en imprescindible la incorporación masiva de nuevos jóvenes a filas. En 2001, los problemas fueron evidentes, y el Gobierno los achacó a "el tratamiento informativo dado al llamado síndrome de los Balcanes y los sucesos del 11 de septiembre".
Pero los datos de 2002, dice Defensa, son mucho mejores. El número de peticiones se ha elevado 35.342, lo que supone 10.261 más que el año anterior. La misma nota añade que en total ya se han asignado destinos a 15.237 aspirantes". El número de mujerres soldados y marineras ha alcanzado ya el 15,38% del total.
La nota de Defensa destaca como elementos más significativos de este año la participación española en misiones internacionales en Afganistán, Bosnia Herzegovina, Kosovo y Macedonia y las reformas organizativas, y la colaboración en la lucha contra el terrorismo internacional. La nota dedica sólo tres líneas a la "brillante operación" de Perejil.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 6 de enero de 2003