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Del Bosque, contento con sus jugadores

Vicente del Bosque, entrenador del Madrid, apareció cariacontecido en los pasillos del estadio Olímpic. El entrenador elogió al rival por su actitud, su entrega y por no haberse rendido nunca pese a que a veinte minutos del final el resultado era de 1-3. "Yo ya avisé que era un equipo correoso. Nos ha complicado la vida. La eliminatoria está abierta".

Celades advirtió en la víspera que los suplentes del Madrid recibirían "muchos palos" si el partido iba mal. Las críticas, al menos, no las recibirán por parte de su entrenador. "No, no estoy disgustado con mis jugadores", aclaró Del Bosque. "Estoy muy contento con su comportamiento. Esto nos ha pasado por no aprovechar las ocasiones. El empate no lo pongo en el debe de nuestro equipo sino en el haber del Terrassa, que al final incluso nos hizo sufrir". El entrenador no aclaró, sin embargo, si en el partido de vuelta, que se celebrará el próximo martes, elegirá a los titulares o los suplentes, aunque insinuó que la base del equipo sería la misma que ayer no pasó del empate en un estadio Olímpico que se dividió a la hora de celebrar los goles de uno y otro equipo.

"Es un resultado bonito para la vuelta. Estamos vivos: no vamos a ir de excursión a Madrid", dijo satisfecho Miguel Álvarez, el técnico egarense. El entrenador dijo que, paradójicamente, vio posible la victoria cuando iban 1-3. "El Marid al principio nos impresionó, nos maniató. Pero con el 1-3 vi que mis jugadores se liberaban de la presión, los nervios, y que jugaban muy sueltos", dijo el entrenador que señaló que Babangida y Santi, que salieron en la segunda parte, "aportaron velocidad al equipo".

La fiesta del Terrassa fue también una fiesta culé. El nigeriano Babangida, el autor del primer gol, está cedido por el club azulgrana (Van Gaal le dijo que quiere contar con él cuando obtenga el pasaporte español) y Monty, el goleador de la noche, es socio del Barça. "Estoy muy excitado por los dos goles. Soy culé", reveló eufórico Monty, que se sacó una espina de encima: ayer admitió que le supo mal marcar un gol al Barça en la final de la Copa Cataluña.

* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 9 de enero de 2003