La comunicación de Smit Tak a la Administración española (Sasemar) el 13 de noviembre a las 21.08 es tajante: "Para evitar confusiones y malentendidos", le informa de que Smit Tak "tiene un contrato" con Remolcanosa, propietaria del remolcador Ría de Vigo, que va a hacer valer. Y le dice que el capitán del buque ya había sido avisado para que cumpliera ese acuerdo privado. El contrato con la Administración, por tanto, ya no valía. Por si hubiera dudas, Smit Tak aclara que ha recibido en ese instante la confirmación de Remolcanosa de que el Ría de Vigo, que ya estaba en la zona, está a las órdenes de Smit Tak.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 13 de enero de 2003