El jefe del Ejército argentino, general Ricardo Brinzoni, negó ayer haber reivindicado al fallecido ex dictador Leopoldo Galtieri y dijo que sólo le tributó "los honores que le correspondían por el cargo que ostentó y el grado que tenía". Galtieri, que padecía un cáncer de páncreas, falleció el domingo a los 76 años. Fue sepultado al día siguiente con honores militares en Buenos Aires, donde Brinzoni dijo que Galtieri "cumplió como un soldado disciplinado todas las órdenes políticas e institucionales dictadas por el Ejército". También destacó que el fallecido "en los últimos años enfrentó con entereza las dificultades" derivadas de las investigaciones judiciales.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 15 de enero de 2003