Existen dos maneras de afrontar una trayectoria artística frente a los vaivenes artísticos externos al creador. Una consiste en subirse sin billete al tren de las modernidades puntuales, sin saber distinguir entre innovación y moda. En los últimos años hemos visto cómo muchos artistas, por miedo a quedarse descolgados de la modernidad del momento, han buscado en la fotografía una forma de no perder comba ante el cambio de actitud que con relación a este soporte han tenido muchas galerías. El resultado, en muchos de los casos, no ha sido siempre afortunado porque el proceso artístico puede ser inducido por la intuición o el razonamiento, pero nunca por condicionamientos de mercado. La alternativa a esta actitud es mantenerse en sintonía externa con el momento contemporáneo de la historia absorbiendo de forma personal aquello que la evolución natural del arte pueda aportar.
RAMÓN BILBAO
'Formas de silencio' Fotografía digital y dibujo. Galería Greca Ganduxer, 45. Barcelona. Hasta el 15 de febrero
Ramón Bilbao se encuentra en este caso. Su habitual lenguaje pictórico, obsesionado por crear personales caligrafías, ha encontrado en la fotografía digital un medio adecuado para expandirse. Y lo ha hecho empleando el lenguaje sígnico de las manos utilizado por los sordomudos, un vocabulario cuya obviedad quiere poner al descubierto su reflexión sobre la forma de los sonidos. Bilbao descompone las fotografías de manos para mostrar la evidencia del signo que representan. El suyo es un intento de mostrar cómo se puede hallar lo obvio incluso en convenciones de origen arbitrario. La pirueta conceptual que se encuentra tras la evidencia plástica de las obras es precisamente reflexionar sobre cómo el silencio, como expresión de la mínima intensidad de los sonidos, puede también encontrar su configuración formal.
Junto a las fotografías, Bilbao presenta unos dibujos que han podido ser utilizados como medio preparatorio de las fotografías pero que adquieren dimensión diferenciada.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 18 de enero de 2003