American Airlines, primera compañía aérea del mundo, cerró el ejercicio 2002 con unas pérdidas que duplicaron las registradas en 2001. La empresa obtuvo unos números rojos de 3.275 millones de euros, un 99% más que los 1.653 registrados el año anterior.
La aerolínea atribuye los resultados a elementos excepcionales contabilizados. Excluyendo esos factores, la pérdida asciende a 1.865 millones, cantidad más parecida a la registrada en 2001. El presidente de American Airlines, Don Carty, fue tajante con respecto a los resultados, que calificó de "insostenibles". Carty argumentó que la desaceleración económica, la subida de los carburantes y la antesala de la guerra en Irak explican las pérdidas.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 23 de enero de 2003