La selección alemana de balonmano respondió ayer con goles y con una victoria sobre Islandia al rumor lanzado por César Argilés, seleccionador español, de que estas dos selecciones querían amañar su resultado y jugar a perder para evitar encontrarse con Yugoslavia. Alemania se entregó a fondo para ganar. Dominó a Islandia, como era previsible, por 34-29, y se clasificó como primero del grupo B. Islandia queda segunda y Portugal, tercera.
Así, España se jugará ante Islandia el pase a semifinales. Argilés había anunciado el sábado que un delegado de la Federación Internacional le aseguró que circulaba el rumor de que Alemania e Islandia jugarían a perder.
"No he oído nada más al respecto", indicó Argilés tras el España-Túnez. "Aún no sé el resultado. Cuando veamos si gana Alemania o Islandia será el momento de hablar. Sin embargo, estas especulaciones son posibles porque la estructura del Mundial las permite. El sistema nos deja a todos bajo sospecha". Después desapareció del pabellón y ni siquiera se le encontró por el hotel.
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Alemania jugó un partido impecable.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 27 de enero de 2003