La Bolsa española logró en la jornada de ayer subidas en los indicadores, después de cuatro días consecutivos de pérdidas. Los mercados se tomaron un respiro y las compras hicieron acto de presencia en buena parte de los valores, gracias a unos niveles que muchos inversores consideran atractivos. Cuestión de precios y nada más fue lo que permitió esta recuperación de la renta variable, pues la situación de fondo no ha variado para nada y nadie piensa que la tendencia a la baja se haya terminado.
La incertidumbre respecto a las consecuencias de una guerra con Irak sigue muy presente y además los datos que se conocen muestran una económia débil y que no termina de despegar. En EE UU se conoció un aumento de las peticiones de subsidio de desempleo peor de lo esperado, y el producto interior bruto creció a un ritmo del 0,7% en el último trimestre de 2002. Esta cifra se situó por debajo de las previsiones de los analistas y vuelve a plantear serias dudas sobre la recuperación de la economía americana.
En un ambiente de gran cautela, la volatilidad se impone de nuevo y el índice general de la Bolsa de Madrid se anotó una subida del 1,22%, mientras que el Ibex 35 ganó el 1,32%. Los valores fuertes del mercado lograron finalizar con subidas, donde destacó la revalorización del BBVA del 1,71%. La entidad de crédito sorprendió por sus negativos resultados, ya que presentó un descenso en sus beneficios del 27% frente al 10% esperado. En Europa, París y Londres se anotaron subidas superiores al 2%, aunque Francfort comenzó a mostrar síntomas de debilidad al cierre de la sesión.
El volumen de negocio en el mercado continuo fue de 1.826 millones de euros, y la divisa se depreció respecto a los últimos días y marcó un cambio medio en 1,0748 dólares.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 31 de enero de 2003