La policía italiana detuvo el jueves en Nápoles a 28 ciudadanos paquistaníes a los que acusó de delitos de terrorismo y posesión de explosivos. Según la policía, tenían 800 gramos de explosivos y mapas señalando intereses norteamericanos en la ciudad. También tenían un mapa de Bagnoli, una localidad cercana que aloja un cuartel de la OTAN. Pakistán ha declarado que los cargos contra los detenidos carecen de fundamento. Los supuestos terroristas fueron hallados durante una redada rutinaria en busca de inmigrantes ilegales.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 1 de febrero de 2003