1. ¿Cree que Sadam Husein representa un peligro para la paz mundial? 2. ¿Cree que está justificado un ataque a Irak? 3. ¿Qué opinión le merece la política en torno a la guerra del Gobierno de José María Aznar? 4. ¿Cómo cree que puede afectar este conflicto a la unidad europea?
1. Como dictador, Sadam es, ante todo, una desgracia para su pueblo y para todos los demócratas del mundo, y es muy probable que esté armado como se le supone, pero, hoy por hoy, parece que el único peligro serio para la paz mundial es el señor Bush, mucho más armado que Sadam, con armas más peligrosas y dispuesto a emprender una guerra contra el deseo y el sentir de la mayor parte de los demócratas del mundo.
2. Ni han podido probar las conexiones entre Irak y Al Qaeda ni han hallado los famosos arsenales, de manera que cabe suponer que las razones para esta guerra son otras que nadie quiere decirnos por impresentables e injustificadas.
3. No parece una política muy cervantina: ensalza al poderoso y humilla al humilde, arrogante y despectiva con los españoles y servil con los americanos.
4. Lo esencial es una idea humanista del mundo y de la vida, ni utilitarista ni belicosa. Y esa idea, por suerte, está uniendo a millones de personas de la vieja Europa y de América contra aquellos pocos que tratan de desfigurar no ya la unidad europea, sino el rostro de la humanidad.
Andrés Trapiello (Manzaneda de Torio, León, 1953) es escritor. Novelista, ensayista, poeta, articulista -colaborador de EL PAÍS-, editor y autor de dietarios, Trapiello acaba de ganar el premio Nadal.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 3 de febrero de 2003