Carlos González Cepeda, consejero de Justicia, negó ayer cualquier injerencia del director general de Justicia, Eloy Velasco, en funciones judiciales. De ese modo respondió a la queja elevada por el decano de los jueces de Alicantes al Tribunal Superior de Justicia (TSJ). El juez decano de Alicante protestó por la restricción de acceso a la sala en la que ayer se inició la celebración del juicio por el "caso Ardystil" el pasado jueves para un magistrado y varios periodistas. Según Cepeda, la decisión de acceso restringido obedecía a que la sala en cuestión se encontraba en obras de adecuación para la celebración de la vista, y en esa circunstancia, dado que en el momento de la visita a las dependencias no se celebraba juicio alguno, Justicia actuó, como propietaria que es, en aplicación del protocolo de "preparación, elaboración y ejecución de los programas de reparación y conservación de los edificios judiciales". Cepeda negó así el sentido de la queja "porque ha habido un malentendido, no ha habido injerencia alguna".
Por otra parte, Justicia llegó ayer a un acuerdo en la mesa de función pública con los sindicatos CSIF y Cemsatse. Dejó fuera del acuerdo a CC OO y UGT, que pedían, entre otras cosas, que el complemento mínimo específico para los funcionarios de justicia, que compete a la Generalitat, fuera equivalente al mínimo que cobran los funcionarios de la Administración autonómica. Ambos sindicatos anuncian movilizaciones de protesta.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 5 de febrero de 2003