Nueva jornada de caídas en las bolsas mundiales con todos los mercados en negativo. En Europa, el español Ibex 35 perdió el 2,4%; Londres se dejó el 2,69%, y Francfort, el 4,32%. La negativa apertura de Wall Street engordó rápidamente los descensos, que durante la mañana de ayer fueron mucho más moderados. Al cierre, el índice estadounidense Dow Jones retrocedió el 1,19%, mientras que el Nasdaq se dejaba el 1,34%.
Ayer se combinaron las malas noticias empresariales con la presentación en la víspera de unos presupuestos en EE UU para 2004 que incrementan de manera significativa el déficit público. Alcatel publicó su séptima pérdida trimestral consecutiva y una menor facturación en el inicio del año.
La firma francesa contagió a la sueca Ericsson, que también espera crecer menos en este arranque de año. Ericsson perdió el 12% de su valor. AIG, la mayor aseguradora por capitalización bursátil del mundo, registró también un duro castigo tras anunciar que provisionará 1.800 millones de dólares para atender posibles reclamaciones.
Para más males, los inversores convivían ayer con la inquietud sobre la intervención hoy del secretario de Estado norteamericano, Colin Powell, ante el Consejo de Seguridad de la ONU, que los analistas consideran como el anuncio de las hostilidades con Irak. Un cúmulo de malas noticias que impulsaron al euro durante toda la jornada para que al final fijase un cambio de 1,0890 dólares, volviendo a máximos de las últimas sesiones.
El contexto prebélico ha desinflado los índices bursátiles, que ya arrojan pérdidas muy abultadas. El índice Dax alemán cae un 9% en el año y lidera las pérdidas de las bolsas europeas, donde la española destaca por un descenso de sólo el 2,72% en el año.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 5 de febrero de 2003