El pleno del Parlamento Europeo, reunido ayer en Estrasburgo, aprobó por amplia mayoría exigir visado a los ciudadanos ecuatorianos que deseen entrar en la Unión Europea, pero añadió una enmienda socialista mediante la cual se pide a los Quince que consideren a este país como objetivo prioritario en los programas de ayuda al desarrollo. La nueva medida, impulsada por España, Italia y los tres países del Benelux (Bélgica, Holanda y Luxemburgo), entrará en vigor el próximo 1 de abril.
Los grandes partidos de la Eurocámara -popular, socialista y liberal- votaron la propuesta de añadir a Ecuador a la lista de los 132 países cuyos ciudadanos necesitan visado para entrar en la UE. Verdes e Izquierda Unitaria, como hicieron el 21 de enero en la comisión parlamentaria de Libertades, votaron en contra.
La nueva medida venía bendecida por los quince ministros del Interior, que la aprobaron en diciembre pasado tras examinar los abundantes datos aportados por varios países y especialmente por España, que constató un creciente problema de orden público y, sobre todo, el espectacular aumento del número de ecuatorianos que residen ya ilegalmente en este país y del elevado número de residentes procedentes de aquel país, que son ya unos 156.000; el segundo contingente después de los marroquíes (más de 260.000).
"La inclusión de Ecuador" en la lista "es una importante señal de alerta de la grave situación económica que atraviesa dicho país, por lo que el Consejo y la Comisión, en el marco de sus competencias respectivas, deberían considerar prioritario la inclusión de Ecuador en los programas de ayuda al desarrollo", dice la enmienda aprobada ayer e introducida por la socialista española Anna Terrón i Cusí.
Para el ponente de
l reglamento, el eurodiputado popular español Jorge Salvador Hernández Mollar, la exigencia de visado "es el camino necesario para acabar con el drama humano de la inmigración ilegal".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 12 de febrero de 2003